Seudoartrosis (no unión): una guía completa sobre causas, síntomas y tratamiento
Puntos clave
- Dolor persistente o que empeora: Un dolor profundo y sordo en el sitio que puede ser constante o agravarse con la actividad. En la seudoartrosis espinal, esto puede ser dolor de cuello o espalda.
- Dolor irradiado: Dolor que viaja desde la columna hacia los hombros, brazos o piernas (dolor radicular).
- Inestabilidad: Una sensación de que el hueso o la articulación no está estable o segura.
- Síntomas neurológicos: Entumecimiento, hormigueo o debilidad si la articulación falsa está comprimiendo los nervios cercanos.
- Movilidad reducida: Dificultad para mover la extremidad o el área afectada de la columna.
- Sonidos de chasquido o crujido: Un sonido o sensación perceptible con el movimiento.
La seudoartrosis, también conocida como no unión, es un término médico para una fractura ósea que no logra sanar correctamente. En lugar de que las piezas rotas se unan para formar un hueso sólido, se forma una conexión fibrosa e inestable, creando una "articulación falsa" (del griego pseudo- que significa falso, y artrosis que significa articulación). Esta afección puede provocar dolor persistente, inestabilidad y un impacto significativo en la calidad de vida, especialmente cuando ocurre después de una cirugía de fusión espinal.
Esta guía integral sintetiza información de importantes revistas médicas, instituciones de salud y encuestas a pacientes para proporcionar una descripción completa de la seudoartrosis, desde sus causas subyacentes hasta las últimas opciones de tratamiento.
¿Qué es la Seudoartrosis?
Normalmente, después de que un hueso se rompe, el cuerpo inicia un complejo proceso de curación para cerrar la brecha y formar hueso nuevo y sólido. Cuando este proceso se interrumpe o falla, ocurre una no unión o seudoartrosis. Esta afección es una complicación significativa después de las fracturas y es particularmente desafiante cuando ocurre después de una fusión espinal, un procedimiento quirúrgico destinado a conectar permanentemente dos o más vértebras para eliminar el movimiento y aliviar el dolor.
Según una investigación publicada en el Journal of the American Academy of Orthopaedic Surgeons, la seudoartrosis es el resultado de un intento fallido de fusión espinal y puede manifestarse meses o incluso años después de la cirugía inicial [1]. Aunque puede ocurrir en cualquier hueso, es más común en huesos largos como la tibia y en la columna vertebral.
!Radiografía que muestra seudoartrosis de la tibia
Imagen de rayos X que demuestra una clara no unión (seudoartrosis) en la tibia.
Fuente: Radiopaedia.org, rID: 15479
Síntomas: Reconociendo los Signos de una Fusión Fallida
Aunque algunas personas con seudoartrosis pueden ser asintomáticas, muchas experimentan síntomas notables. El signo más común es el dolor persistente en el sitio de la fractura o cirugía mucho después de que debería haber sanado.
Los síntomas clave incluyen:
- Dolor persistente o que empeora: Un dolor profundo y sordo en el sitio que puede ser constante o agravarse con la actividad. En la seudoartrosis espinal, esto puede ser dolor de cuello o espalda.
- Dolor irradiado: Dolor que viaja desde la columna hacia los hombros, brazos o piernas (dolor radicular).
- Inestabilidad: Una sensación de que el hueso o la articulación no está estable o segura.
- Síntomas neurológicos: Entumecimiento, hormigueo o debilidad si la articulación falsa está comprimiendo los nervios cercanos.
- Movilidad reducida: Dificultad para mover la extremidad o el área afectada de la columna.
- Sonidos de chasquido o crujido: Un sonido o sensación perceptible con el movimiento.
Curiosamente, un estudio señaló que alrededor del 30% de las personas con seudoartrosis confirmada radiográficamente no informan ningún síntoma [2].
Descubriendo las Causas y Factores de Riesgo
La incapacidad de un hueso para sanar suele ser un problema multifactorial, que implica una combinación de problemas biológicos, mecánicos y relacionados con el estilo de vida. Comprender estos factores de riesgo es crucial tanto para la prevención como para el tratamiento.
Factores Relacionados con el Paciente y el Estilo de Vida
Ciertas condiciones de salud y hábitos personales pueden interferir significativamente con la capacidad de curación del cuerpo.
- Fumar: Este es uno de los factores de riesgo más significativos. La nicotina contrae los vasos sanguíneos, reduciendo el flujo sanguíneo y el suministro de oxígeno y nutrientes esenciales para la curación ósea. También inhibe la función de los osteoblastos, las células responsables de formar hueso nuevo [3].
- Edad: Las personas mayores pueden tener procesos de curación más lentos y una calidad ósea reducida.
- Afecciones médicas: Enfermedades como la diabetes, la osteoporosis, la anemia grave y los trastornos metabólicos pueden comprometer la salud y la reparación ósea [4].
- Obesidad: El exceso de peso ejerce una tensión adicional sobre los huesos en curación, especialmente en la columna, lo que puede dificultar la fusión.
- Mala nutrición: Las deficiencias en nutrientes cruciales como el calcio, la vitamina D y las proteínas pueden impedir que el cuerpo construya tejido óseo fuerte.
- Medicamentos: El uso a largo plazo de esteroides y medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE) puede interferir con la curación ósea.
Factores Quirúrgicos y Mecánicos
La naturaleza de la lesión y el propio procedimiento quirúrgico juegan un papel vital.
- Inmovilización inadecuada: Si el hueso fracturado o el sitio de fusión no se mantiene perfectamente quieto, el micromovimiento constante puede impedir que las células óseas cierren la brecha.
- Suministro sanguíneo deficiente: Ciertos huesos tienen un suministro de sangre naturalmente limitado. Un traumatismo grave que daña los vasos sanguíneos circundantes también puede provocar una no unión.
- Infección: Una infección bacteriana en el sitio quirúrgico puede abrumar la respuesta de curación del cuerpo.
- Técnica quirúrgica: El éxito de una fusión puede depender de la técnica del cirujano, incluida la preparación adecuada de las superficies óseas y la colocación segura del material quirúrgico (tornillos y varillas).
- Fusiones multinivel: Fusionar múltiples vértebras a la vez aumenta la tensión mecánica y la demanda biológica, elevando el riesgo de seudoartrosis en uno o más niveles.
Cómo se Diagnostica la Seudoartrosis
El diagnóstico de la seudoartrosis implica una combinación de una evaluación clínica exhaustiva e imágenes avanzadas. Un médico primero discutirá sus síntomas e historial médico, seguido de un examen físico.
El diagnóstico definitivo se realiza generalmente con estudios de imagen:
- Rayos X: Los rayos X estándar, particularmente las vistas en flexión-extensión (donde se inclina hacia adelante y hacia atrás), pueden revelar la falta de un puente óseo en la brecha de la fractura o mostrar movimiento entre las vértebras que se suponía que estaban fusionadas.
- Tomografías computarizadas (TC): Las tomografías computarizadas proporcionan una vista tridimensional mucho más detallada del hueso. Las tomografías computarizadas de corte fino se consideran el estándar de oro para evaluar si se ha formado una fusión sólida y pueden identificar incluso pequeñas brechas en el hueso [1].
- Resonancia magnética (RM): Se puede utilizar una RM para evaluar los tejidos blandos circundantes, como los nervios y los discos, para descartar otras causas de dolor.
El Dr. Alpesh Patel habla sobre la seudoartrosis estable en atletas. Fuente: Cervical Spine Research Society en YouTube.
Seudoartrosis Congénita vs. Adquirida
Es importante distinguir entre la seudoartrosis que se desarrolla después de una lesión o cirugía (adquirida) y una forma rara que está presente al nacer (congénita).
| Característica | Seudoartrosis Congénita | No Unión Postquirúrgica Adquirida |
|---|---|---|
| Inicio | Presente al nacer o se desarrolla en la primera infancia. | Ocurre después de una fractura o cirugía en un hueso previamente normal. |
| Ubicación común | Afecta con mayor frecuencia a la tibia. | Puede ocurrir en cualquier hueso, pero es común después de una fusión espinal. |
| Causa subyacente | Una anomalía del desarrollo donde el tejido óseo es inherentemente displásico (anormal). A menudo asociado con la neurofibromatosis tipo I (NF-I). | Fracaso del proceso de curación normal debido a diversos factores de riesgo (p. ej., tabaquismo, infección, inestabilidad). |
| Calidad ósea | El segmento óseo afectado es débil y tiene un bajo potencial de curación. | El hueso suele estar sano antes de la fractura. |
| Enfoque del tratamiento | Cirugía reconstructiva compleja para extirpar el tejido anormal y lograr una unión estable. | Abordar la causa específica de la no unión y estimular la curación. |
| Pronóstico | Desafiante, con un alto riesgo de refractura y no unión persistente, que a veces requiere múltiples cirugías. | Generalmente favorable con el tratamiento adecuado, lo que conduce a altas tasas de unión exitosa. |
Un estudio de 2025 en el Journal of Orthopaedic Surgery and Research destaca las complejidades del tratamiento de la seudoartrosis congénita de la tibia (SCT), señalando que incluso las osteotomías correctivas necesarias (cortes en el hueso) son controvertidas debido a problemas de curación [5].
Un Espectro de Opciones de Tratamiento
El tratamiento para la seudoartrosis se adapta a cada individuo, dependiendo de la ubicación de la no unión, la gravedad de los síntomas y la salud general del paciente.
Manejo no Quirúrgico
Para los pacientes que son asintomáticos o malos candidatos para la cirugía, el tratamiento conservador puede ser la primera opción.
- Estimuladores óseos: Estos dispositivos externos utilizan ondas ultrasónicas o electromagnéticas pulsadas de bajo nivel para fomentar el crecimiento óseo en el sitio de la no unión.
- Corsé: Se puede usar un corsé a medida para inmovilizar el área, reduciendo el movimiento y el dolor mientras se le da al hueso otra oportunidad de sanar.
- Fisioterapia: Fortalecer los músculos alrededor del área afectada puede mejorar la estabilidad y la función.
- Modificaciones en el estilo de vida: Dejar de fumar, optimizar la nutrición y manejar condiciones subyacentes como la diabetes son pasos esenciales.
Intervención Quirúrgica
Cuando los tratamientos conservadores fallan o los síntomas son graves, a menudo es necesaria la cirugía. El objetivo de la cirugía es establecer la estabilidad y estimular una respuesta de curación biológica robusta.
- Cirugía de revisión con injerto óseo: Este es el enfoque más común. El cirujano retira cualquier material quirúrgico fallido, extirpa el tejido fibroso de la "articulación falsa" y prepara los extremos del hueso para crear una superficie fresca para la curación. Se coloca un injerto óseo —ya sea un autoinjerto (hueso tomado del propio cuerpo del paciente, a menudo de la pelvis) o un aloinjerto (hueso de donante)— en la brecha para proporcionar un andamio y células que promuevan la formación de hueso nuevo.
- Fijación mejorada: Se utiliza material nuevo y más rígido, como placas, tornillos o varillas, para proporcionar una estabilidad absoluta.
- Biológicos: En algunos casos, se pueden usar sustancias como las Proteínas Morfogenéticas Óseas (BMP, por sus siglas en inglés) para estimular potentemente el crecimiento óseo.
- Estimulación eléctrica: Los estudios han encontrado que los dispositivos de estimulación eléctrica, a veces implantados internamente, pueden aumentar significativamente las tasas de fusión después de la cirugía de columna [6].
!Fijación quirúrgica de una fractura con no unión
Reparación quirúrgica de una no unión femoral utilizando una placa y tornillos para proporcionar estabilidad.
Fuente: Wikimedia Commons, usuario Bone_and_joint
Pronóstico y Vida Después del Tratamiento
El pronóstico para los pacientes con seudoartrosis ha mejorado con las técnicas quirúrgicas modernas. Con el tratamiento adecuado, las tasas de éxito para lograr una fusión sólida pueden ser tan altas como del 80-90%.
Sin embargo, el camino puede ser desafiante. La cirugía de revisión suele ser más compleja que el procedimiento inicial. Incluso después de una fusión exitosa, algunos pacientes pueden experimentar síntomas persistentes. El impacto a largo plazo en la calidad de vida puede ser significativo, especialmente en lo que respecta a la salud mental. El dolor crónico y la discapacidad pueden llevar a la depresión y la ansiedad, que pueden no resolverse por completo incluso después de corregir el problema físico.
Un enfoque integral que aborde tanto los aspectos físicos como psicológicos de la afección es crucial para lograr el mejor resultado posible a largo plazo. Si experimenta dolor persistente después de una fractura o cirugía de fusión, es esencial consultar a un cirujano ortopédico o especialista en columna para una evaluación exhaustiva.
Referencias
- Raizman NM, O'Brien JR, Poehling-Monaghan KL, Yu WD. Pseudarthrosis of the spine. J Am Acad Orthop Surg. 2009 Aug;17(8):494-503. https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/19652031/
- Leven D, Cho SK. Pseudarthrosis of the Cervical Spine: Risk Factors, Diagnosis and Management. Asian Spine J. 2016 Aug;10(4):776-86. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4995265/
- Cuellar Spine. Pseudarthrosis After Fusion Treatment & Symptoms. https://cuellarspine.com/insights/pseudarthrosis-after-fusion/
- MedicalNewsToday. Pseudarthrosis: Definition, symptoms, and treatments. https://www.medicalnewstoday.com/articles/pseudoarthrosis
- Liu, Y., Zhu, G., Liao, S. et al. Does an osteotomy performed in congenital pseudarthrosis of the tibia accompanied by tibial angular deformity heal?. J Orthop Surg Res 20, 397 (2025). https://josr-online.biomedcentral.com/articles/10.1186/s13018-025-05806-z
- Marquez-Lara A, D'Agostino R, Medda S, Ricciardi L, Ramhmdani S. Electrical stimulation therapy in spinal fusion: a cross-sectional analysis of indications and outcomes. J Neurosurg Spine. 2020 Jan 1;32(1):106-112. https://thejns.org/spine/view/journals/j-neurosurg-spine/32/1/article-p106.xml
Descargo de responsabilidad: este artículo tiene fines informativos únicamente y no constituye un consejo médico. Siempre consulte con un profesional de la salud calificado para cualquier problema de salud o antes de tomar cualquier decisión relacionada con su salud o tratamiento.
Sobre el autor
Samuel Jones, MD, is a board-certified orthopedic surgeon specializing in joint replacement and orthopedic trauma. He is a team physician for a professional sports team and practices at a renowned orthopedic institute in Georgia.