Por qué te duele la espalda al toser: Causas, alivio y prevención
Puntos clave
- Contracción muscular intensa: Los músculos que sostienen la columna vertebral pueden distenderse o incluso sufrir un esguince por las contracciones violentas y repetitivas de una tos persistente, similar a una lesión por levantar algo demasiado pesado.
- Aumento de la presión espinal: El aumento de la presión intraabdominal ejerce una tensión directa sobre los discos intervertebrales, los cojines que absorben los impactos entre las vértebras. Esto puede causar dolor, especialmente si un disco ya está debilitado o dañado.
- Mala mecánica corporal: La mayoría de las personas se encorvan naturalmente hacia adelante al toser. Esta postura ejerce una tensión adicional en los músculos y ligamentos de la espalda baja, alterando la curva natural y la estabilidad de la columna.
Ese dolor repentino y agudo en la espalda cada vez que toses puede ser más que una simple molestia, puede ser alarmante. No eres el único que experimenta esto. Una tos fuerte es un acto físico violento que involucra todo tu torso, y es una razón común para un dolor de espalda nuevo o que empeora.
Aunque la causa suele ser una simple distensión muscular, el dolor a veces puede indicar un problema subyacente en la columna vertebral. Esta guía sintetiza conocimientos médicos y consejos prácticos para ayudarte a entender por qué te duele la espalda al toser, cómo encontrar alivio y cuándo es el momento de consultar a un médico.
¿Por qué me duele la espalda cuando toso? La mecánica explicada
La tos es el potente reflejo de tu cuerpo para despejar las vías respiratorias. Esta acción explosiva implica una contracción rápida y contundente del diafragma, los músculos abdominales e incluso los de la espalda. Este proceso crea un aumento repentino de la presión dentro del abdomen y el pecho, lo que impacta directamente en la columna vertebral.
Según investigaciones y expertos médicos, esto puede provocar dolor de espalda de varias maneras:
- Contracción muscular intensa: Los músculos que sostienen la columna vertebral pueden distenderse o incluso sufrir un esguince por las contracciones violentas y repetitivas de una tos persistente, similar a una lesión por levantar algo demasiado pesado.
- Aumento de la presión espinal: El aumento de la presión intraabdominal ejerce una tensión directa sobre los discos intervertebrales, los cojines que absorben los impactos entre las vértebras. Esto puede causar dolor, especialmente si un disco ya está debilitado o dañado.
- Mala mecánica corporal: La mayoría de las personas se encorvan naturalmente hacia adelante al toser. Esta postura ejerce una tensión adicional en los músculos y ligamentos de la espalda baja, alterando la curva natural y la estabilidad de la columna.
Causas comunes del dolor de espalda al toser
El tipo y la ubicación de tu dolor pueden ofrecer pistas sobre la causa subyacente. Si bien el diagnóstico de un médico es esencial, comprender las posibilidades puede ayudarte a describir tus síntomas con mayor claridad.
Distensión musculoesquelética (músculos tironeados)
Este es el culpable más frecuente. Un ataque de tos repentino e intenso o un episodio prolongado de tos pueden estirar en exceso o desgarrar las fibras musculares de la espalda.
- Características del dolor: Es probable que sientas un dolor agudo y localizado o una molestia sorda. El área puede estar sensible al tacto y podrías experimentar espasmos musculares o rigidez que empeora con el movimiento.
Hernia o protusión discal
La tos puede ser un gran agravante para los problemas relacionados con los discos. El aumento de la presión puede hacer que un disco dañado se abulte o se hernie, presionando los nervios espinales cercanos.
- Características del dolor: Esto a menudo causa un dolor agudo, punzante o similar a una descarga eléctrica. Si el disco afectado está en la espalda baja y presiona el nervio ciático, puedes experimentar ciática: un dolor que se irradia desde la espalda hacia el glúteo y la pierna. Como señala Medical News Today, también puede ocurrir hormigueo y entumecimiento en las piernas.
!Ilustración anatómica de una hernia de disco presionando un nervio espinal.
Ilustración de una hernia de disco. Fuente: Wikimedia Commons
Estenosis espinal
Esta condición implica el estrechamiento del canal espinal, lo que ejerce presión sobre la médula espinal y los nervios. Una tos puede aumentar momentáneamente esta presión, desencadenando el dolor.
- Características del dolor: El dolor se describe a menudo como un calambre o una molestia en la espalda baja y las piernas. Curiosamente, el dolor de la estenosis espinal puede mejorar al inclinarse hacia adelante, ya que esta posición puede crear temporalmente más espacio en el canal espinal.
Afecciones pulmonares o respiratorias subyacentes
En algunos casos, el origen tanto de la tos como del dolor de espalda es una enfermedad respiratoria. Afecciones como la neumonía o la bronquitis pueden causar inflamación en los pulmones y la cavidad torácica, lo que puede referir dolor a la espalda.
- Características del dolor: Este dolor se siente a menudo en la parte superior o media de la espalda. Generalmente va acompañado de otros signos de enfermedad, como fiebre, dificultad para respirar o escalofríos. Si experimentas estos síntomas, es crucial buscar atención médica para tratar la infección subyacente.
Cómo encontrar alivio: Tratamientos en casa
Para el dolor de espalda causado por una distensión muscular, varios remedios caseros pueden proporcionar un alivio significativo mientras tu cuerpo —y tu tos— se recuperan.
Manejo inmediato del dolor
- Descansa, pero no dejes de moverte: Evita actividades extenuantes que empeoren tu dolor durante uno o dos días. Sin embargo, el reposo total en cama puede provocar más rigidez. Se recomienda el movimiento suave, como caminar.
- Terapia de frío y calor: En las primeras 48 horas, aplica una bolsa de hielo envuelta en una toalla en el área dolorida durante 15-20 minutos a la vez para reducir la inflamación. Después de eso, cambiar a una almohadilla térmica puede ayudar a relajar los músculos tensos y adoloridos.
- Medicamentos de venta libre (OTC): Los antiinflamatorios no esteroideos (AINE) como el ibuprofeno (Advil, Motrin) o el naproxeno (Aleve) pueden reducir tanto el dolor como la inflamación.
Medidas de apoyo para aliviar la tensión
- Mejora tu postura: Presta atención a cómo te sientas y te pones de pie. Encorvarse ejerce una tensión adicional en la espalda. Siéntate con la espalda apoyada y párate erguido con los hombros hacia atrás.
- Usa soporte lumbar: Coloca una almohada pequeña o una toalla enrollada detrás de la parte baja de la espalda al sentarte para mantener su curva natural y reducir la presión.
La forma correcta de toser: Técnicas para proteger tu espalda
No siempre puedes detener la tos, pero puedes cambiar cómo toses para minimizar el impacto en tu espalda. Expertos en columna de ADR Spine y fisioterapeutas recomiendan técnicas de refuerzo.
- Refuérzate: Antes de toser, estabiliza tu columna. Puedes hacerlo de las siguientes maneras:
- Apoyándote contra una pared o sujetándote a una mesa o mostrador resistente.
- Colocando las manos sobre los muslos para apoyarte.
- Abrazando una almohada firmemente contra el estómago y la espalda baja. Este simple acto, recomendado por Baylor Scott & White Health, ayuda a absorber parte de la fuerza.
- Mantén una columna vertebral neutra: Intenta no encorvarte hacia adelante. En su lugar, dobla ligeramente las caderas y las rodillas, manteniendo la espalda lo más recta posible.
Estrategias a largo plazo para la prevención
Si eres propenso al dolor de espalda o tienes una tos crónica, fortalecer el sistema de soporte de tu cuerpo es clave.
- Fortalece tu torso (core): Los músculos abdominales y de la espalda fuertes actúan como un corsé natural, estabilizando tu columna. Ejercicios como las planchas, el "pájaro-perro" y los puentes son excelentes para desarrollar la resistencia del torso.
- Estiramientos suaves: El estiramiento regular puede aliviar la tensión muscular y mejorar la flexibilidad. Los estiramientos de gato-vaca y llevar suavemente las rodillas al pecho pueden ser particularmente útiles para la espalda baja.
- Ejercicios de respiración: Técnicas como la respiración diafragmática (abdominal) pueden ayudarte a manejar tu respiración y pueden reducir la severidad de los ataques de tos.
- Ajustes en el estilo de vida:
- Mantente hidratado: Beber mucha agua ayuda a diluir la mucosidad, lo que potencialmente hace que la tos sea menos fuerte.
- Usa un humidificador: El aire húmedo puede calmar las vías respiratorias irritadas y reducir la tos, especialmente por la noche.
- Aborda la causa de la tos: Trabaja con tu médico para manejar la causa raíz de tu tos, ya sean alergias, reflujo ácido (ERGE) u otra afección.
Cuándo consultar a un médico
Aunque la mayoría de los dolores de espalda relacionados con la tos se resuelven a medida que la tos disminuye, algunos síntomas justifican una evaluación médica inmediata. Nebraska Medicine aconseja consultar a un médico por cualquier tos que dure más de tres semanas.
Contacta a tu proveedor de atención médica si tu dolor de espalda es:
- Severo, constante o empeora progresivamente.
- No mejora con cuidados en casa después de una semana.
- Interfiere con tus actividades diarias o tu sueño.
Busca atención médica inmediata si experimentas alguno de los siguientes síntomas de "bandera roja", ya que podrían indicar una compresión nerviosa grave u otra condición urgente:
- Entumecimiento, hormigueo o debilidad en una o ambas piernas.
- Pérdida del control de la vejiga o los intestinos.
- Dolor acompañado de fiebre alta, escalofríos o pérdida de peso inexplicable.
- Dificultad para respirar o tos con sangre.
Al comprender la conexión entre la tos y el dolor de espalda, puedes tomar medidas efectivas para manejar tu malestar, proteger tu columna y saber cuándo buscar ayuda profesional.
Sobre el autor
Leo Martinez, DPT, is a board-certified orthopedic physical therapist specializing in sports medicine and post-surgical rehabilitation. He is the founder of a sports therapy clinic in Miami, Florida that works with collegiate and professional athletes.