'Hemorroides reventadas (almorranas): Guía completa sobre causas, síntomas y tratamiento'
Puntos clave
- Dolor severo y constante: A diferencia de la incomodidad intermitente de las hemorroides regulares, una trombosada a menudo causa un dolor agudo y persistente, lo que dificulta sentarse o caminar.
- Un bulto palpable: Puede sentir un bulto duro y sensible cerca de su ano.
- Decoloración: El bulto puede parecer azulado o morado debido al coágulo de sangre en su interior.
La experiencia de una almorrana reventada, también conocida como hemorroide, puede ser alarmante e incómoda. Ver sangre puede causar una alarma inmediata, pero entender qué está sucediendo, por qué y cómo responder puede proporcionar una gran tranquilidad. Aunque a menudo se puede manejar en casa, es crucial saber cuándo buscar atención médica profesional.
Esta guía completa cubre las causas, síntomas, tratamientos y estrategias de prevención para las almorranas reventadas, ayudándole a navegar esta condición común pero angustiante.
Entendiendo las almorranas reventadas: ¿Qué significa?
Las almorranas, o hemorroides, son venas hinchadas ubicadas en la parte inferior del recto y alrededor del ano. Pueden ser internas (dentro del recto) o externas (debajo de la piel alrededor del ano). Una almorrana no se revienta espontáneamente; la ruptura es casi siempre el resultado de una hemorroide trombosada.
Una hemorroide trombosada ocurre cuando se forma un coágulo de sangre dentro de la vena. Este coágulo hace que la hemorroide se hinche significativamente, convirtiéndose en un bulto duro y doloroso. A medida que la presión arterial se acumula dentro del vaso atrapado, la piel o membrana que lo recubre puede estirarse hasta adelgazarse y finalmente romperse, liberando la sangre atrapada.
Según la información de salud de Spire Healthcare y Healthline, este evento es más común con las hemorroides externas, que están cubiertas por piel con muchos nervios sensibles al dolor, lo que hace que el proceso previo a la ruptura sea intensamente doloroso.
!Ilustración de hemorroides internas y externas Una ilustración que muestra la ubicación de las hemorroides internas y externas. Fuente: Medical News Today
Síntomas: Cómo saber si una almorrana se ha reventado
Los signos de una almorrana reventada se pueden dividir en lo que se experimenta antes y después de la ruptura.
Signos de una almorrana trombosada (antes de reventar)
- Dolor severo y constante: A diferencia de la incomodidad intermitente de las hemorroides regulares, una trombosada a menudo causa un dolor agudo y persistente, lo que dificulta sentarse o caminar.
- Un bulto palpable: Puede sentir un bulto duro y sensible cerca de su ano.
- Decoloración: El bulto puede parecer azulado o morado debido al coágulo de sangre en su interior.
Síntomas de una almorrana reventada
- Sangrado repentino: Puede notar sangre de color rojo brillante en el papel higiénico, en la taza del inodoro o en su ropa interior.
- Liberación de presión: Muchas personas informan una sensación inmediata de alivio del dolor una vez que la almorrana se ha reventado y se libera la presión.
- Coágulos de sangre: Es posible expulsar pequeños coágulos de sangre junto con la sangre.
- Dolor persistente: Es probable que la zona permanezca sensible y dolorida mientras comienza a sanar.
¿Es una almorrana reventada una emergencia médica?
En la mayoría de los casos, una almorrana reventada no es una emergencia que ponga en peligro la vida. El sangrado, aunque alarmante, suele ser mínimo y se detiene por sí solo en unos pocos minutos.
Sin embargo, existen riesgos asociados y razones importantes para ser cauteloso:
- Infección: Una hemorroide reventada crea una herida abierta, que es vulnerable a las bacterias de las heces. Mantener la zona limpia es esencial para prevenir una infección.
- Anemia: Aunque es raro, el sangrado crónico o recurrente de las hemorroides puede llevar a la anemia, causando síntomas como fatiga y mareos.
- Diagnóstico erróneo: El peligro más significativo es asumir que todo sangrado rectal proviene de una hemorroide. El sangrado rectal puede ser un síntoma de afecciones más graves, como fisuras anales, enfermedad inflamatoria intestinal (EII) o cáncer colorrectal.
Por esta razón, siempre se recomienda consultar a un médico ante cualquier nuevo episodio de sangrado rectal para asegurar un diagnóstico correcto.
Cuándo ver a un médico de inmediato
Busque atención médica de emergencia si experimenta alguno de los siguientes síntomas de "alerta roja":
- Sangrado abundante o continuo: Si el sangrado dura más de 10 minutos o si está perdiendo grandes cantidades de sangre.
- Signos de pérdida de sangre significativa: Sentirse mareado, aturdido, desmayado o tener dificultad para respirar.
- Dolor severo que no disminuye: Si el dolor continúa o empeora después de la ruptura.
- Signos de infección: Fiebre, escalofríos o una secreción maloliente (pus) de la zona.
- Otros síntomas preocupantes: Pérdida de peso inexplicada, cambios persistentes en los hábitos intestinales o dolor abdominal severo.
Cuidado inmediato: Qué hacer en casa para una almorrana reventada
Si sus síntomas son leves y no experimenta ninguna señal de alerta, puede manejar una almorrana reventada en casa para promover la curación y aliviar la incomodidad.
Paso 1: Limpieza suave
Limpie la zona anal suavemente con agua tibia después de una evacuación intestinal. Un baño de asiento o una ducha de mano pueden ser efectivos. Evite frotar con fuerza y usar jabones o toallitas perfumadas, que pueden causar irritación. Seque la zona dando palmaditas con una toalla suave y limpia.
Paso 2: Calmar con un baño de asiento
Un baño de asiento es un baño poco profundo de agua tibia que limpia y alivia la zona perineal.
- Llene un lavabo o bañera con 3-4 pulgadas de agua tibia (no caliente).
- Remoje la zona afectada durante 15-20 minutos, 2-3 veces al día, especialmente después de las evacuaciones intestinales.
- Seque suavemente la zona dando palmaditas después.
Paso 3: Aplicar una compresa fría
Para reducir la hinchazón y adormecer la zona, envuelva una bolsa de hielo en una toalla delgada y aplíquela en el ano durante 10-15 minutos cada vez.
Paso 4: Usar alivio de venta libre (OTC)
- Analgésicos: El paracetamol (Tylenol) puede ayudar a controlar el dolor. Según Medical News Today, es mejor evitar los AINE como el ibuprofeno (Advil) o la aspirina, ya que pueden aumentar el riesgo de sangrado.
- Cremas tópicas: Los ungüentos que contienen hamamelis o una dosis baja de hidrocortisona pueden ayudar a reducir la picazón y la inflamación.
Curación, recuperación y prevención de recurrencias
Una almorrana reventada generalmente sana en una semana. Durante este tiempo, el objetivo más importante es prevenir el estreñimiento y el esfuerzo, que pueden agravar la herida y hacer que se formen nuevas hemorroides.
Prevención de futuras ocurrencias
El manejo a largo plazo se centra en hábitos de vida y dietéticos para mantener las heces blandas y las evacuaciones intestinales regulares.
- Coma una dieta alta en fibra: Apunte a 25-35 gramos de fibra por día de fuentes como frutas, verduras, granos integrales, frijoles y nueces. Un suplemento de fibra (cáscara de psyllium) también puede ayudar.
- Manténgase hidratado: Beba mucha agua durante todo el día para ayudar a que la fibra funcione eficazmente y ablande las heces.
- Haga ejercicio regularmente: La actividad física estimula la función intestinal. Trate de hacer al menos 30 minutos de ejercicio moderado la mayoría de los días.
- Adopte hábitos de baño saludables:
- Vaya al baño tan pronto como sienta la necesidad.
- Evite hacer fuerza o contener la respiración durante una evacuación intestinal.
- No se siente en el inodoro por períodos prolongados, ya que esto aumenta la presión sobre las venas anales.
Tratamientos médicos para almorranas graves o recurrentes
Si las hemorroides son un problema persistente, un médico puede recomendar un procedimiento médico. Estos generalmente se reservan para hemorroides graves, prolapsadas o que sangran crónicamente:
- Ligadura con banda elástica: Se coloca una pequeña banda de goma alrededor de la base de una hemorroide interna para cortar su suministro de sangre, haciendo que se seque y se caiga.
- Escleroterapia: Se inyecta una solución química en una hemorroide interna para que se encoja.
- Hemorroidectomía: Un procedimiento quirúrgico para eliminar completamente las hemorroides externas grandes o las internas prolapsadas. Este es el tratamiento más efectivo para los casos graves, pero tiene un período de recuperación más largo.
Referencias
- Healthline. (2025). Can a Hemorrhoid Burst and Is It Dangerous?. Obtenido de https://www.healthline.com/health/burst-hemorrhoid
- Medical News Today. (2020). Burst hemorrhoid: Symptoms, treatment, and seeking help. Obtenido de https://www.medicalnewstoday.com/articles/burst-hemorrhoid
- Spire Healthcare. (2023). Bleeding and burst haemorrhoids. Obtenido de https://www.spirehealthcare.com/health-hub/specialties/general-health/bleeding-and-burst-haemorrhoids/
- Bangkok Hospital. (2024). Be Careful!!! Hemorrhoid can burst if becomes thrombosed. Obtenido de https://www.bangkokhospital.com/en/bangkok/content/do-not-let-broken-hemorrhoids
Sobre el autor
Fatima Al-Jamil, MD, MPH, is board-certified in gastroenterology and hepatology. She is an Assistant Professor of Medicine at a university in Michigan, with a clinical focus on inflammatory bowel disease (IBD) and motility disorders.